NOTICIAS DEL PALO

jueves, febrero 08, 2007

Batman, callate la boca




A lo largo de los sesenta y ocho años de vida que tiene el hombre murciélago, su mente recibió duros golpes que al día de hoy todavía dejan su marca.
En la década del 80, presenció la muerte de los padres de Dick Grayson, el joven que luego se convertiría en la primer persona en vestir el traje de Robin; su segundo discípulo, Jason Todd, fue asesinado a manos del Guasón en la recordada miniserie “Una muerte en la familia” y Bárbara Gordon, mejor conocida como Batichica, perdió la movilidad de sus piernas a causa de un disparo que le propinó el payaso del crimen, en la memorable historia “La broma asesina”.
Durante los noventas Batman tampoco la pasó bien: en la miniserie “La caída del murciélago”, una masa de músculos llamada Bane le fracturó la columna, provocando que durante varios números Bruno Díaz delegara el manto del murciélago en otra persona.
La frutilla del postre llegó cuando los escritores tomaron la decisión de que Ciudad Gótica sea azotada por un terremoto que destruyó todo a su paso, en la saga titulada “Cataclismo”.
En “Batman Silencio”, el guionista Jeph Loeb plantea una historia en la que un villano clásico del hombre murciélago, orquesta un plan para poder ponerle fin a la vida del caballero nocturno; además se produce la introducción de una persona que esta fuertemente ligada al pasado de Bruno Díaz.
El arte de Jim Lee hace que los doce números sean una obra de arte para el lector, además de representar en todo su esplendor a la galería de villanos clásicos del murciélago.
Los números fueron publicados en Estados Unidos durante el año 2003 en la serie regular de Batman(números 608 al 619) y en nuestro país se consigue la versión en ingles y en castellano.
La saga “Batman Silencio” la podes conseguir en la comiquería Meridiana, cine y comics, en la sucursal del shopping Caballito ó en la del Paseo la Plaza.
El precio de los números en castellano es de 5 pesos y los tomos en ingles se consiguen por encargo.>

2 pegó

  • Al final los buenos también sufren. Hasta en las historietas, joya.

    Un abrazo.
    Martín Alejandro.

    pegóAnonymous Anónimo, a las 17:15  

  • la conclusion es: los malos siempre ganan.
    jajaja
    un abrazo fabi!

    pegóBlogger negruu_53, a las 17:14  

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